Mi ventana se encuentra abierta... hace días que trato de plasmar mis sentires en esta tela, pero nada me llama la atención.
Miro el almanaque...en que mes estamos? enero, febrero? no cambie mas las paginas, no tengo idea que día es...mmmmmmmm tomo mi celular y ahí esta 21 de marzo....ja Primavera!!!!!
Sigo mirando el blanco lienzo, como hipnotizado, nada de nada...miro los oleos, la paleta, los pinceles y mi cerebro esta en blanco...
Algo llama mi atención...sonidos diferentes, y observo....la gente ríe, canta, los niños juegan, aun hace algo de frío, pero hay mas claridad, y poco a poco el sol da sus primeros calores....
Cerca una fuente deja sentir el rumor del agua cuando cae y aunque me parecen a lo lejos artificiales, de los balcones cercanos se ven bellas plantas, verdes decoradas o coronadas por bellisimas flores de diferentes colores y el cielo es de un color casi irreal....
Vuelvo a mi lienzo y sigue en blanco, pienso que soy un fracaso, pero la calidez del sol me atrae y vuelvo a distraerme con el paisaje que deja ver mi ventana, un bello pueblo entre majestuosas montañas, con calles angostas y empedradas, las casas a cual de todas mas bellas con sus tejas rojas y todas pintadas de blanco, aunque algo lejos del mar se puede oír en las noches calmas su rugir, hacia el centro del territorio en el que se encuentra, corre un bello río de aguas cristalinas y cascadas, donde según cuentan, iban las lavanderas y se bañaban gran parte del pueblo.
Volví a mira el lienzo y mire por la ventana y me dije..... pintemos sobre esto, porque imaginarlo si lo tenemos aquí.
Me puse mi delantal de pintor, mi boina y tome mi paleta de colores, debía reflejar con ellos la realidad, debía hacer sentir que los que vieran el cuadro sintieran que estaban ahí.
Recree el bosquejo con carboncillo, cada detalle, cascadas, río, piedras, pared de las cascadas, arboles , todo sin olvidar detalle, luego adjudique una letra a cada sector, llegado el momento seria mi guía para pintar, por lo general las letras son de los colores que usare para el proyecto, en este caso era todo improvisado y sobre la marcha cambiaría, tonos, sombras, luces etc.
Comencé mezclando negro y amarillo para crear verde oscuro, un verde aceituna, fácil de cubrir con colores mas oscuros, luego cubrí todo aquello que había realizado, dejando ver las lineas de carboncillo.
El color verde era el que mayor espacio ocupaba en mi imagen imaginaria, había hierba, arboles, musgo.
Seguí con el verde ya que delimitaba el resto del paisaje hojas de arboles, hierba a la orilla del rió, musgo en lo que seria luego piedras, luego el marrón presente en las ramas y tronco de los arboles, en las hojas de las ramas quebradas, en las piedras pulidas por el agua, cada uno de los colores que agregaba me acercaban mas a eso que en mi mente veía.
Toques de lila, violeta, rojo y rosado, para flores silvestres, que crecen a orillas del río y para las flores de los arboles que decoran el paisaje.
Por ultimo el agua, debía verse cristalina y fresca, tan fresca que dieran ganas de beberla.
Con blanco , mezclado apenas con celeste, pinte el agua y luego esfume los trazos y les di movimiento, para crear el efecto de caída.
Faltaba el sonido del agua y el trinar de los pájaros para hacerlo realidad, después de tanto esperar, el lienzo tenia vida.
Me recosté en el sillón y seguí mirando por la ventana, el día casi culminaba.
Avefenix
